D E S M E M B R A N Z A S
Bienvenidos todos aquellos que tengan sed de justicia, hambre de cambio, y dolor bañado de humor. Aquí se habla de todo: noticias, libros, farsas, sentires, y paranoias también.
AMIGO TIEMPO
REPRESA
El problema fue que no fueron dos sino cien o doscientos, en un segundo, como el golpe duro del hacha en la madera fresca. Inesperados.
Cualquiera habría pensado que tantos años de esfuerzo arrebatarían un gajo de compasión al tiempo, las termitas y a la historia. No fue así: metros y más metros cúbicos de historias, llenas de furia y peso condensado no pararon, no debían, no querían, no sabían cómo no.
Ahí se borró todo: las esperanzas, los sueños, el hambre, la necesidad. Un cementerio natural. Así siguió el agua su cauce. Metros y metros de humedad y renovación. Debía ser así. Siempre se cruza el río con zapatos distintos.
Cazadores
Progreso 1
Recuerdo el sellar de labios que sacudía como la luna que temblaba en el agua, así, como en el capítulo 34.
Maldigo las sonrisas enmarcadas de comisuras tensas.
Brindo por las palabras hirientes/absurdas que hoy no tienen eco.
Encuaderno peticiones que ya incluyen los padresnuestros.
Lloro dardos que dieron en el blanco.
Escupo sobre tumbas de vivos murientes.
Relamo los bigotes que deja la espuma en mi playa privada.
Duermo segundos que soñaba con dormir.
Fastidio, por placer y entretenimiento, a los parásitos.
Digiero cocinas del mundo sin moverme de lugar.
Canto sin la vergüenza de destrozar las indicaciones del pentagrama.
Vivo sin sentirme como en un juicio oral.
Piñatas
PECES
COMUNIDAD
Anhelo y deseo de esos días. Mágicos, en comunión. Éramos una comunidad. Una fotografía perfecta. Sonrisas, lazos, velos sin descubrir. Sentido de pertenencia. Rueda que giraba porque sí. Ondas de agua que se perpetuaban en los diálogos. Corazones palpitantes llenos de ingenuidad y soberbia. Palabras grandilocuentes. Pasados compartidos. Llagas vivas. Miedos atroces, pero en comunidad, ¡en comunidad! Prestos a cruzar la trabe que conducía al mundo, al monstruo seductor que terminaría con figuras preconcebidas. Al final, al cruzar el puente, la diáspora. No más comunidad, al menos, concéntrica. Y la rueda gira porque sí.